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Nuestra Historia
Historia de Enda Dominicana
Etapas de la historia de Enda Dominicana
Inicios - 1984
Los programas TRAMIL fueron los primeros en tener grupos de trabajos
1984-1986
Se completa estructuración administrativa y se fija reglamentos internos.
1987-1998
Crecimiento, transición y consolidación de la institución.
1999-2003
Autonomía como institución local y legalización de la organización.
Para 1978, hubo una sede regional de enda para el Caribe, en la isla de Santa Lucía. Esta iniciativa no estableció los vínculos esperados en la región del Caribe.
Desde 1982, enda Sede firma un convenio con el Gobierno Dominicano, mediante acuerdo del Poder Legislativo, con una resolución que le adjudicó el derecho de establecer una sede regional para el Caribe en la República Dominicana. A partir de esta fecha nacen todos los programas nacionales y regionales que hoy forman parte de la vida y de la historia de enda en esta región. Con este documento nace Medio Ambiente y Desarrollo en el Caribe, enda-Caribe.
Inicio de Programas en República Dominicana – 1984
El acompañamiento de enda-Caribe, a organizaciones base de las comunidades marginadas en la República Dominicana se inicia temprano en 1984. Anterior a estas acciones enda-Caribe se dedicó a varios estudios regionales, a establecer contactos y estructurarse propiamente como institución regional.
Los programas de Desarrollo Agroforestal, Desarrollo Urbano, Construcción Rural, Artesanía e Investigación del uso popular de Plantas Medicinales (TRAMIL), fueron los primeros en tener grupos de trabajos asociados en las comunidades dominicanas y adelantar acciones con resultados concretos sobre el terreno. Poco a poco se fueron acumulando experiencias y resultados. Algunos de estos resultados se encuentran en publicaciones de enda-Caribe.
Establecimiento y estructuración – 1984 a 1986
Junto al inicio de los anteriores programas, de forma simultánea enda-Caribe realiza todas las acciones que terminan con un verdadero establecimiento como organización internacional, pero con una fuerte interacción y resultados de esos proyectos y programas a nivel local. El acompañamiento a asociaciones como la Federación Campesina de Zambrana y Chacuey, en el municipio de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez, el adelanto en renglones de la investigación participativa y científica en el uso popular de plantas medicinales y en el establecimiento y manejo de sistemas agroforestales, reforestación e investigación sobre maderables nativos, así como la participación a todos los niveles de las discusiones y proposiciones con incidencia local, el involucramiento del pequeño agricultor, como elemento decisivo en el cultivo del árbol, la biodiversidad y el rescate de la agricultura campesina, la convierten en una institución vista como actor nacional difícil de separar del contexto del Medio Ambiente.
En este período enda-Caribe completa su estructuración administrativa, fija sus reglamentos internos, de gerencia de programas y proyectos, consolidas sus alianzas y convenios de cooperación técnica y financiera con agencias externas.
Crecimiento de enda-Caribe – 1987 a 1991
Con una estructura administrativa y de gerencia ya definida y varios contactos de cooperación técnica y financiera, surge el crecimiento en cuanto al número de técnicos cooperante externos y nacionales, así como de proyectos financiados. Este crecimiento fue muy apreciable. También se amplió el número de organizaciones y comunidades rurales y urbanas involucradas en las actividades sobre el terreno.
En este período enda-caribe tuvo un máximo de 18 proyectos en las diversas áreas mencionadas arriba y una nómina de más de 50 personas de 10 nacionalidades diferentes.
En esta etapa inicial varias instituciones de cooperación externa apoyaron con personal, como el Servicio Alemán de Cooperación Social y Técnica (DED) y CID, cooperación belga e italiana, también las principales financiadoras (Agro Acción Alemana, Fundación de Francia, BFDW, ICCO, UE, entre otros).
Transición y consolidación – 1992 a 1998
A partir del inicio de la década de los 90’s, la institución dispone de un personal suficiente y capaz, que mostraba dominio y madurez aparente para conducirse de forma autónoma. Como esos fueron las metas iniciales de la representación para el Caribe de enda, se inicia desde ese momento un proceso de tránsito a la autonomía. El inicio oficial se da con una comunicación desde la sede autorizando la formación de una entidad local en forma de prueba.
El intento de formar “enda-Quisqueya ” o “enda Hispaniola ” (nombres barajados para la institución posible) abortó. Sectores mayoritarios del personal empleado, no aprobaron la autonomía.
A partir de ese momento la representación para el Caribe toma la decisión, en consulta con la sede, de delegar la dirección de enda para República Dominicana en un profesional nativo. Durante esta experiencia se sucedieron dos directores dominicanos, responsables de conducir a enda-Caribe en República Dominicana. Muchas experiencias se acumularon y fue un periodo muy útil para probar la capacidad local. De esa forma a final de la década, ya el equipo dominicano, de forma gradual había asumido casi la totalidad de la planificación, las negociaciones, la conducción y políticas internas de enda en la República Dominicana.
Paralelamente se fue trabajando la forma de una posible enda netamente local. Sus estatutos, reglamentos y estructuras de gerencia y dirección fueron definidos y escritos en consulta con todos los actores involucrados. Siempre se contó con el apoyo y la decisión de la representación para el Caribe. Para el 1999, ya se tiene superado todas las dudas que existieron al principio, la reducción del volumen de proyectos y de personal fue significativa, como estrategia de consolidación o por simple fin de proyectos y convenios de cooperación. Mientras tanto, se mantuvieron los ejes de trabajo principales y se incorporó y maduró bastante el tema de políticas de género en el desarrollo y acciones de la institución.
A partir de ese año, 1999, la autonomía local de enda en República Dominicana es prácticamente total. Solo asuntos formales, incluido algunas ventajas impositivas, se mantienen dentro del estatus internacional. En otro orden, este estatus es el mismo que limitaba el acceso a fondos locales e internacionales.
Sin embargo, las últimas evaluaciones externas y auditorias administrativas del año 1999, 2000, y 2003, indicaban claramente que ya era hora de dar el paso definitivo hacia una autonomía institucional. En ese periodo se define concretamente la separación administrativa. De igual manera se planifica y se hacen contactos para seleccionar la Junta Directiva e iniciar el proceso legal.
Legalización – 2003
En abril de 2002 se firma la primera acta de constitución y se inicia el proceso de legalización de enda-Dominicana (enda-dom). Este proceso culmina con la expedición del Decreto Presidencial No.357-03, del poder Ejecutivo, de fecha 8 de abril, 2003, que concede el beneficio de incorporación a ENDA DOMINICANA como ONG nacional.
A este nivel, el equipo actual de empleados, junto a los líderes y organizaciones comunitarias urbanas y rurales, dan seguimiento fiel, de avance y consolidación ahora en etapas superiores, a los resultados obtenidos por enda-Caribe en agroforestería, salud comunitaria, agua, saneamiento urbano y rural. Todos estos avances y seguimientos, ahora están bajo la conducción y orientación de la Junta de Directores local de enda-Dominicana.
Paralelamente a esa etapa final, la sede enda T. M. ha ingresado a una etapa de actualización y revisión a nivel mundial. Enda-Dominicana y enda-Caribe han participado activamente en este proceso de consulta y reflexión, tanto localmente como en dos eventos en Dakar. El actual Director Ejecutivo y una líder campesina son miembros de la Asamblea General de enda, con sede en Dakar. En la Asamblea del 2003 la Dirección Ejecutiva en estas oportunidades negoció el estatus de la nueva enda-Dominicana , presentó sus reportes financieros anuales y su estructura, proyectos, programas actuales y en perspectiva. Ahora enda-Dominicana está registrada en Dakar, con los mismos derechos y deberes que las otras 14 entidades regionales.
Últimamente, en la sede de enda se están definiendo claramente los roles y derechos de las entidades, los cuadros directivos y las regionales. enda–Dominicana participa activamente, a través de su personal y sus instancias locales de dirección y asociados de base en estas discusiones, con aporte de ideas , voz y voto.
Actualmente enda-Dominicana forma parte de varias redes locales, es miembro de cooperativas y tiene asesoradas varias microempresas de las que ha formado, siendo las más importantes la Agroforestal de Zambrana, y el Fondo de Crédito en el Barrio Los Tres Brazos (en autonomía administrativa), además de La Esperanza en Bayaguana y El Vencedor en Villa Altagracia.
Un trabajo de más de 30 años, en 4 continentes a favor del Sur. 33 entidades presentes en 14 países (19 en Senegal, 5 en África, 5 en América latina, 2 en Asia, y 2 en Europa) 150 programas y proyectos. Una participación activa en 96 redes internacionales, 5 financiadores centrales esenciales, apoyo de 17 países y 80 instituciones en diferentes niveles de intervención.
El funcionamiento dentro de la autonomía ganada 2003 – 2023
Superada esta etapa de formación, definición de roles y funcionamiento autónomo, enda dominicana opera durante estos 20 años, con total autonomía, reforzando los ejes principales de acompañamiento a grupos comunitarios, proyectos y regiones. De preferencia localmente los temas sobre medio ambiente, reforestación, manejo forestal, empresas forestales privados y comunitaria, educación inicial, agua potable, prestación de servicios a terceros, producción agroforestal, restauración de ecosistemas, educación y formación de equipos locales, así como medidas de remediación ante el cambio climático. Los temas de salud comunitaria, plantas medicinales pasaron a ser liderados por enda caribe a nivel regional.
Una de las expectativas más esperadas era el acceso a los recursos financieros gubernamentales para las asociaciones sin fines de lucro. Puede contarse como una de las frustraciones locales más sentidas. Jamás enda dominicana ha podido acceder a estos importantes fondos que asigna el Gobierno Dominicano anualmente.
Por otro lado, hay que destacar, que enda dominicana ha tenido que enfrenar el crecimiento vertiginoso de los requisitos burocráticos y técnicos, sin distinción ni consideración alguna, por sus servicios sin fines de lucro y en pro de las comunidades y el medio ambiente. Se trata del proceso de “habilitación” periódica ante los mismos ministerios, los requisitos de la Dirección General de Impuestos Internos, Procuraduría General de la República, Alcaldías locales, etc. Igual, las instituciones financieras internacionales y locales, han aumentado astronómicamente el volumen de documentación, registros, informes, auditorías, evaluaciones, reportes, para todo tipo presupuestos o cooperación técnica.
Actualmente la institución cuenta con en una treintena de empleados, en cuatro proyectos. Igualmente tiene cuatro proyectos en carpeta con fines de concurso para buscar la aprobación y diversidad de acciones en terreno. Durante estos 20 años, no ha tenido cierre, ni financiero ni operativo. Aunque NO tiene patrimonio ni local ni fondos propios de altos montos, la institución no tiene deudas, ni pasivos laborales. Tiene los fondos de los proyectos y un mínimo de fondos propios que le garantizan su estabilidad a corto y mediano plazo.
Perspectiva en el presente
Cada día el empoderamiento local luce más efectivo. La actual Junta Directiva ha mostrado interés de una vinculación más directa y activa con el funcionamiento de la institución. De igual forma, la búsqueda de recursos financieros, técnicos y profesionales es un reto que ya tiene en sus manos con buenas perspectivas. Con esto se garantiza la sostenibilidad de la institución y la capacidad para actuar en el futuro cambiante de los tiempos.